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Primeros votos de dos hermanas: “Queremos desgastar la vida al servicio de quienes más necesitan sentir a Dios cerca”

Primeros votos de dos hermanas: “Queremos desgastar la vida al servicio de quienes más necesitan sentir a Dios cerca”

El 24 de febrero, Loli Fernández y Geraldyn Carrero hicieron sus primeros votos como hermanas Carmelitas de la Caridad Vedruna en la parroquia San Félix, de Villaverde (Madrid). Estuvieron presentes jóvenes de los distintos grupos Vedruna que han hecho camino con ambas, hermanas de las distintas comunidades de Madrid y de las comunidades que las acogerán en su nueva etapa, y amigos de la Familia Vedruna.

 

Vuestra profesión de votos ha sido todo un acontecimiento para toda la Familia Vedruna. ¿Cómo lo habéis vivido vosotras? ¿Con qué os quedáis de todos los mensajes que habéis recibido?

Después de mucho tiempo, llegó el momento que tanto estábamos esperando: nuestra primera profesión religiosa como Carmelitas de la Caridad Vedruna. Ha sido un día muy especial. Lo hemos vivido desde la entrega y sabiendo que estamos cumpliendo el querer de Dios para cada una de nosotras. Es un paso más del camino en el seguimiento de Jesús. Los nervios estaban a flor de piel, pero teníamos un corazón agradecido. Le damos muchas gracias a Dios por el día que vivimos y por haberlo podido hacer en profundidad.

Vivimos una celebración sencilla pero llena de símbolos de y sentido. Teníamos cerca a la gente que nos quiere y se le ha hecho posible acompañarnos en persona, pero también nos llegaba mucho cariño desde muchos lugares y comunidades que ese día nos han tenido presentes especialmente, en la oración.

Tras haber realizado ya un importante camino en la congregación, ¿qué permanece intacto y qué evoluciona de esa primera llamada que os llevó a seguir a Jesús por el camino de Joaquina?

Como ya hemos dicho, este es un paso más del camino. Lo que pertenece intacto en este tiempo, es el amor a Jesús, que no cambia, es incondicional; pero nos trasforma constantemente, si le dejamos. Ese amor es lo que nos empuja a vivir cada día, junto a otras/os y en la misión a la que se nos envía.

En este tiempo de la etapa del Noviciado hemos crecido mucho en conocimiento de nosotras mismas y en ahondar en la historia, las raíces y el presente de la Familia Vedruna, sabiendo que Jesús es siempre el centro.

La Vida Religiosa en Europa, en general, y la Vedruna, en particular, se encuentra en un momento de adaptación a la realidad demográfica y cultural. ¿Cómo veis ese futuro? ¿Qué tipo de misión pensáis que os espera, en qué se diferencia del que otras hermanas Vedruna hicieron antes que vosotras?

Vemos el futuro con mucho realismo, porque hay dificultades, pero también con esperanza, porque también hay muchos retos, posibilidades, vida, sabiendo, además, que todo no depende de nosotras, aunque nos pongamos a ello como si fuera así. El Buen Jesús lo alienta todo. Y queremos estar abiertas a lo que se va transformando en la Familia Vedruna, ese nacer de nuevo al que se nos invita desde el Último Capítulo General.

Ahora somos llamadas a vivir en diferentes lugares, siempre en relación y al servicio de quienes más necesitan sentir a Dios cerca. Y en ello queremos desgastar la vida, en el día a día.

Fecha

marzo 10, 2024

Categoría

Nacional