El Equipo de Justicia, Paz e Integridad de la Creación (JPIC) de la Provincia Vedruna Europa hace suya la propuesta del movimiento Laudato Si, y ha enviado a todas las comunidades el calendario de esta organización para ayudar a vivir la Cuaresma en clave de conversión ecológica.
Además de los recursos tradicionales de la Iglesia y otros específicos preparados por el Movimiento, se anima a participar en diversas iniciativas aconfesionales o de otras confesiones que guardan relación con el sentido de la Cuaresma, como “los lunes sin carne”, que buscan concienciar del impacto ambiental del exceso de consumo de animales.
La invitación al activismo, incluso en ámbitos como el financiero, se complementa con sugerencias para momentos de retiro y reflexión, oraciones y lecturas para estas semanas de preparación de la Pascua.
La web https://laudatosilent.org/es/ contiene abundantes propuestas, entre las que destaca este calendario de Cuaresma repleto de iniciativas realizables tanto a nivel individual como comunitario.
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La relación de Vedruna Europa con el Movimiento Laudato si se remonta a hace ahora un año, explica Montse Fenosa desde el Eje JPIC, siguiendo la recomendación del último Capítulo General de “colaborar con otras organizaciones comprometidas” en dar una respuesta al clamor de la Tierra y de las personas empobrecidas, en línea con lo que pide el Papa en la encíclica Laudato si.
Se trata de una colaboración de ida y vuelta. “Recibimos los materiales, hemos participado en uno de los encuentros internacionales y nos comunicamos cuando podemos ofrecer algún material o solicitar algo para animar en la línea de Laudato si”, añade Fenosa.
Toda esa colaboración se intensifica enmomentos como la Semana Laudato si, en el Tiempo de la creación que se abre con el día de san Francisco de Asís o ahora, en Cuaresma.
“El camino de la Cuaresma nos prepara a dar un giro a nuestra vida, a convertirnos para avanzar en libertad ante los bienes materiales, ante el poder y ante la soberbia”, cree Montse Fenosa.
“Un camino procesual necesario para que sea posible el sueño de Dios de una humanidad de hermanas y hermanos en la que todas, sin distinción, gocemos de la Vida, de la creación. Las personas cristianas no tenemos la exclusiva, otras religiones y convicciones aspiran a esa vida abundante. Para nosotras, cristianas, la Cuaresma nos adentra en el camino para poder vivir la alegría y la libertad que se manifiesta en la Pascua. La que nos trae Jesús resucitado, ese hombre que pasó haciendo el bien y que, por su vida entregada hasta el extremo, fue resucitado por Dios”.
Además, cree, “la espiritualidad Laudato Si nos invita a la conversión de mente, corazón y estilo de vivir que contribuya a la Vida abundante de todas las criaturas del planeta. Ambas, la espiritualidad integral Laudato si y la Cuaresma nos entrenan intensivamente, en primer lugar, a agradecer todo el amor gratuito que recibimos de Dios, a través de su creación y, ligado a ello, a colocarnos en nuestro lugar de criaturas y de guardianas activas de nuestros hermanos y hermanas. Aunque es en la espiritualidad integral donde se subraya más directamente que todas las criaturas de la creación son nuestras hermanas”.
Este año, además, JPIC de la Provincia Europa anima a tener muy presente las situaciones de empobrecimiento, a nivel próximo y local, sin olvidar como “la geopolítica de guerra y sus consecuencias nos espolean a ahondar en esta dirección, para ser lúcidas ante las dinámicas que, aunque sean a nivel micro, nos ayudan a colaborar con la vida o a impedirla”.