“Hacer la voluntad de Dios, sirviendo a los más necesitados desde aquello que nos configura: ser pobres, fraternas y orantes”. Así ha resumido la nueva provincial, Dolors Sitjes, las prioridades para el próximo trienio en una emotiva ceremonia celebrada en Vic. La general, María Inés García, añadió como prioridad una encomienda que le va como anillo al dedo a la nueva superiora de Europa, enfermera de profesión: “abrazar la vulnerabilidad”.
“Te comunico que te hemos nombrado superiora de la Provincia Vedruna Europa para el trienio 2021-2024. Acepta este servicio de animar y coordinar la vida y misión de las hermanas y comunidades junto a las hermanas de tu equipo y conservando la unidad del carisma en comunión con toda la congregación”.
La general de las Carmelitas de la Caridad Vedruna, María Inés García, oficializaba con estas palabras el nombramiento de Dolors Sitjes, a quienes acompañarán en el Equipo Provincial María Irizar y Carmen Montes. La iglesia de la Casa Madre en Vic y el día, no menos señalado para la congregación, de la festividad de la Virgen del Carmen, conformaron un marco lleno de simbolismo para el relevo de los de equipos, en una ceremonia cuidada hasta el extremo de los más pequeños detalles por las organizadoras: la provincial saliente, María Gracia Gil, y la hasta ahora consultora Luisa Villanego.
El agradecimiento al equipo provincial saliente y la bienvenida al nuevo corrió a cargo de algunas decenas de representantes de las comunidades de Catalunya, dado que, por motivos sanitarios, el resto tuvo que conformarse con seguir el acto por el canal de YouTube de la provincia.
El recuerdo a la pandemia estuvo muy presente a lo largo de todo el acto, no solo por la condición de enfermera de la nueva provincial, que ha estado en los últimos meses en primera línea contra la covid en el Hospital de Granollers. María Inés García aludió a la próxima asamblea de la Unión Internacional de Superioras Generales que estará dedicada a “abrazar la vulnerabilidad, haciendo camino sinodal”, algo –dijo– que bien puede “servir como proyecto para nuestra propia Familia Vedruna”.
Representantes de las tres zonas en que se divide la PVE tomaron la palabra para poner en valor la rica diversidad interna en la Familia Vedruna, y para agradecer al Equipo Provincial saliente su cercanía durante los meses más duros de la pandemia. Desde la Zona C, que abarca el territorio de Catalunya, se agradeció también “la comprensión” de “nuestro sufrimiento” por “la nefasta situación política a la cual está sometida nuestro país”, otro de los asuntos que ha marcado la vida interna de la PVE en el último trienio, dado el alto porcentajes de hermanas catalanas. Todo ello, sin olvidar el reto de avanzar en la unificación de la nueva Provincia Europa.
Palabras también llenas de agradecimiento, por último, por parte de la nueva Provincial: al Equipo General, por la confianza depositada; a la PVE, por la cálida acogida, y al Equipo Provincial saliente, por su servicio de acompañamiento a la provincia, “siempre con la mirada fija en Jesús”. Ahora, igual que Joaquina, “el objetivo de nuestra vida” en la PVE es “hacer la voluntad de Dios, sirviendo a los más necesitados desde aquello que nos configura: ser pobres, fraternas y orantes”, concluyó Dolors Sitjes.