En la Casa Santa Joaquina de Vinalesa hemos querido poner en práctica la cultura del encuentro, como exhorta el Papa Francisco. Y, como entre el personal de la casa, confluyen, además de la religión católica, la ortodoxa y la musulmana, hemos podido conocer, compartir y disfrutar de las distintas vivencias y tradiciones de todas ellas.
Aprovechando estos días de las fiestas pascuales, hemos compartido de manera sencilla pero profunda el “por qué y el cómo” se viven estas fiestas en cada una de nuestras respectivas religiones y tradiciones.
Para la religión católica, la Resurrección de Jesús es la que da sentido y plenitud a nuestra Fe. Si Cristo no ha resucitado vana es nuestra Fe (1 Cor 15, 14).
De la Pascua ortodoxa, resaltaron cómo todo renace a partir de la Resurrección y señalaron que uno de los momentos más dulces y entrañables es el intercambio de los típicos huevos de Pascua, pintados de rojo, que simbolizan el circulo de la vida desde el nacimiento hasta la muerte.
Paralelamente se vivió el Ramadán. Durante estos días, se destaca el ayuno, la solidaridad, mostrando el amor concretado en obras de caridad a las personas más necesitadas y la oración, mucha oración, uniéndonos en comunidad universal.
Ha sido una experiencia muy gratificante y enriquecedora fortaleciendo entre la comunidad y toda la plantilla un sentimiento de familia, acogida y respeto, en plan festivo, unidas por la plena convicción que Dios nos une a todos y todas en un abrazo filial.
Comunidad Casa Santa Joaquina de Vinalesa