El reto, dice la directora, es “seguir cumpliendo años educando a miles de gaditanos y gaditanas que pasarán por nuestras aulas, y en los que dejaremos, seguro, la huella de Formar Parte de la Familia Vedruna”
La ciudad de Cádiz ha concedido a la escuela la Medalla de Oro de la ciudad al colegio Nuestra Señora del Carmen de Cádiz. Para Yolanda Castilla, su directora, se trata de un “reconocimiento” una labor educativa que, además de historia, tiene ante sí mucho futuro y una misión que cumplir. La efeméride supone “el mejor puente que las Carmelitas brindamos para el futuro de nuestro Colegio y de la ciudad”, desde “el orgullo de saber que este legado que hemos heredado está en muy buenas manos; en las manos de profesionales que día a día dan lo mejor de sí mismos para formar a personas del presente y del futuro; en familias que apoyan y se implican en éste, nuestro estilo pedagógico; en autoridades y demás personas que nos acompañan hoy aquí en esta celebración ycontando estas buenas noticias…”.
El reto es “seguir cumpliendo años enseñando, educando a miles de gaditanos y gaditanas que pasarán por nuestras aulas, nuestro Centro y en los que dejaremos, seguro, la huella de Formar Parte de la Familia Vedruna”, decía la directora en una conferencia con la que inauguraba los actos de celebración.
La directora, Yolanda Castilla (izquierda), junto a la coordinadora de Pastoral
En una línea similar incide la coordiadora de Pastoral, Merche Calvo. “Hoy nos parece sorprendente que se pueda seguir adelante con esta labor educativa en Cádiz, aunque sea con menos presencia de las hermanas, cuando empezaron todas en el claustro o la mayoría eran hermanas y hoy actualmente en el año 2022, la presencia en el colegio es tan sólo de una hermana”, afirma la religiosa Vedruna. “Esto dice de la realidad palpable de la Congregación: lo más importante es que siendo muchas o solo una hermana; el carisma Vedruna sigue adelante con la misma ilusión que cuando se comenzó la fundación de nuestro colegio”.
“Es una gran alegría que después de 150 años, en Cádiz se necesita de la presencia de las hermanas Carmelitas de la Caridad Vedruna, dando lo mejor y haciéndolo todo al estilo de santa Joaquina, con alegría, amor y confianza, porque el buen Jesús, como ella siempre decía, lo puede todo”, añade Merche Calvo.
“Es verdad que tenemos que ir adaptándonos a los momentos históricos que nos tocan vivir hoy, pero sin perder lo esencial, ser un colegio con ideario cristiano, donde los valores humano-cristianos hay que seguir transmitiendolos, esto es fundamental en nuestra misión de educar”.
Esto último es especialmente importante, a su juicio, en la zona antigua de Cádiz donde se ubica el colegio, con poca presencia hoy de escuelas católicas, lo cual “nos da una idea de la importancia que tiene el seguir evangelizando hoy”.
Entrevista a Merche Calvo:
“Joaquina nos diría hoy: ‘No os detengáis; seguid adelante con confianza en el buen Jesús’”
“Formar a personas que puedan aportar a la sociedad valores humanos y cristianos” sigue siendo el reto dete colegio, afirma la responsable de Pastoral del colegio Nuestra Señora del Carmen de Cádiz
Esta medalla ha sido solicitada por gran número de entidades locales, desde los principales grupos políticos de izquierda o derecha, a diversas parroquias, ONG, clubs deportivos, instituciones culturales de referencia … ¿Qué nos dice esto del significado actual de lo que aporta este colegio a la sociedad?
Son muchos los alumnos que durante estos 150 años han pasado por este colegio. Esto refleja la importancia que tiene el Colegio de las Carmelitas para Cádiz, hasta conceder la medalla. Son muchas las familias que desean agradecer a las hermanas su labor durante tantos años.
Y aporta algo muy importante para la Congregación, la labor educativa que se sigue llevando a cabo, el educar a la persona integralmente: fe, vida e intelectualmente. Todo ello es importante hoy en nuestra sociedad: formar personas que puedan aportar a la sociedad valores humano-cristianos.
Este sigue siendo un colegio muy solicitado en Cádiz por la labor educativa de la persona en todas sus facetas, teniendo como eje principal la educación cristiana.
Merche Calvo (primera por la derecha), junto a otras hermanas Vedruna
Conocemos las grandes celebraciones de esta efeméride. ¿Pero qué os han dicho las familias, las antiguas alumnas y alumnos…? ¿Con qué os quedáis de esta conmemoración que os haya tocado más?
Son muchos los acontecimientos que se van realizando desde el día 31 de Marzo, con la conferencia inaugural de los 150 años de presencia de las hermanas Carmelitas en Cádiz, en el que nos encontramos muchos profesores que han ido pasando por el colegio, familias y alumnos, todos formando esa gran familia Vedruna. Nos acompañó Manuel Pedreño (antiguo padre de alumnos del colegio), amenizando esta conferencia, que nos hizo revivir y situarnos en toda la historia de vida recorrida durante estos años de presencia de las hermanas en Cádiz.
Tendremos otras actividades, la más próxima será la entrega de la medalla concedida a la labor de las hermanas Carmelitas en Cádiz, seguido del encuentro con la Virgen de la Esperanza de la hermandad de la Iglesia de San Francisco, eucaristía de acción de gracias por la presencia de las hermanas Carmelitas en Cádiz,exposición de fotografías de los 150 años de la labor educativa de las hermanas en Cádiz, etc.
Serán muchos los actos que tendremos para celebrar la alegría de este gran momento que vivimos todas las hermanas y la comunidad educativa.
Resaltaría de esta conmemoración la alegría que se respira en nuestro colegio ante este gran acontecimiento, la ilusión por celebrar juntos a todas las familias que durante tantos años han formado y forman parte de esta gran familia Vedruna y el entusiasmo por seguir remando mar adentro para dar continuidad al Carisma Vedruna hoy y siempre.
Si Joaquina estuviese en estos momentos nos diría a todos los miembros de la familia Vedruna: “No os detengais, seguid adelante con gozo y confianza en el buen Jesús, que con él todo se puede. En los momentos de dificultad, sed fuertes, humildes y diligentes, para llevar adelante esta gran misión de educar en la fe”.
Deseo dar gracias por todas las hermanas, profesorado, personal y familias, que durante estos 150 años han ido aportando su granito de arena para que el Colegio de las Carmelitas, siga siendo una gran familia, la familia Vedruna llena de alegría.