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Cada día vivimos un milagro

Cada día vivimos un milagro

En el mes de marzo parecía imposible que hoy pudiéramos estar escribiendo estas líneas. Desde el Colegio Mayor Vedruna de Madrid estamos agradeciendo cada día la posibilidad de estar junto a las 114 colegialas que forman parte de nuestra Familia ampliada.

Tras el decreto de cierre de los centros educativos y las universidades en primavera, nuestras colegialas marcharon a sus provincias. Desde ese momento el Equipo Educativo se puso “manos a la obra” para ofrecer a cada joven el soporte integral que nos caracteriza. El Consejo Colegial (que es un órgano de decisión y de promoción de la vida colegial formado por las propias universitarias) decidió que, a pesar de estar repartidas por toda España, era muy importante seguir manteniendo los lazos y la vida familiar. Así, con ese ánimo, pudimos mantener un ritmo de vida colegial intenso hasta el verano. Fue precioso ver cómo las diferentes delegaciones (pastoral, formación, teatro…) se movilizaron para favorecer que pudiéramos encontrarnos en diferentes momentos. Así, a través de Instagram vivimos un precioso Concierto Solidario (en beneficio de Brasil, a través de la Fundación Vic), una tertulia con una antigua colegiala que nos habló de superación, varias asambleas en las que nos encontrábamos todas, etc. Además, al estar muy vinculadas al Centro de Pastoral Juvenil (CPJV), también mantuvimos oraciones online, tertulias del club de lectura, el grupo de fe de manera semanal, los encuentros del grupo de ecología, etc. ¡Cuánto pudimos crecer en creatividad y apertura! Así, orando cada una por los exámenes de las demás y teniéndonos muy presentes, finalizamos el curso.

Igualmente, deseando acoger en este curso a nuevas colegialas, ofrecimos la posibilidad de mantener las entrevistas de manera online. Así pudimos conocer a todas las solicitantes y a sus familias, con las que ya de manera presencial nos encontramos en el mes de septiembre.

El inicio de curso, como decíamos, ha sido un auténtico milagro. Pertrechadas con todas las medidas de seguridad, con nuestro Protocolo y con la consigna “Nos cuidamos”, iniciamos un atípico curso. La mascarilla y la distancia nos acompañan cada día, en todas las actividades, en todos los espacios y momentos. El comedor, con sus mesas separadas, ha cambiado su dinámica y ahora tenemos que comer en turnos. Todo ello, sin embargo, nos está acercando más. Es emocionante ver a las universitarias cuidándose, queriendo hacer las cosas bien, por sí mismas y por sus compañeras: mensajes y regalos de ánimo cuando una ha de confinarse, la preocupación real cuando algún contacto de clase da positivo, la responsabilidad con la que están asumiendo las restricciones de horario y sus clases online…

Haber llegado al mes de noviembre con el 100% de las actividades en funcionamiento nos emociona y nos hace sentir orgullo por cada una de las jóvenes con las que compartimos la vida. Estamos convencidas de que todo tiempo puede ser vivido como oportunidad, y así estamos afrontándolo desde el Colegio Mayor y desde el CPJV.

Realmente, cada día es un milagro.

Equipo Pastoral CM-CPJV

Fecha

noviembre 16, 2020

Categoría

Jovenes