Una comisión interprovincial ha presentado el borrador del “Proyecto Global LS Vedruna: Comprometidos con la Madre Tierra”. Los ejes centrales son la formación en una espiritualidad Laudato si’ que genere cambios en los estilos de vida personales y comunitarios, y la colaboración en red con entidades afines en cada provincia o delegación.
La Congregación Vedruna y la Provincia Vedruna Europa se han adherido a la Plataforma de Acción Laudato si’, iniciativa lanzada por el dicasterio de Desarrollo Humano de la Santa Sede de la que forman parte diversas organizaciones, católicas o no católicas, comprometidas con el cuidado de la Creación y el desarrollo integral.
Como integrante de esta Plataforma, Vedruna participó el domingo 14 de noviembre en la celebración de la Jornada Mundial de los Pobres presidida por el Papa Francisco.
De forma paralela, representantes de todas las provincias Vedruna (África, América, Europa, India, Japón y la delegación de Filipinas) han puesto en marcha una Comisión Interprovincial de Justicia, Paz e Integridad de la Creación (JPIC), que lleva meses trabajando en el “Proyecto Global LS Vedruna: Comprometidos con la Madre Tierra”.
Se ha elaborado un borrador, actualmente en fase de recepción de comentarios y aportaciones, que se plantea como objetivo “caminar significativa y conjuntamente en la conversión del corazón hacia el Cuidado de la Casa Común y de quienes la habitamos desde la Ecología y la Espiritualidad Integral, que coloreen todo lo que vivimos y nos muevan a la acción”-
Para ello, se promoverán diversas líneas de acción, comenzando por la organización de actividades formativas para “promover la formación en la espiritualidad integral para comprender nuestra interdependencia y la interconexión entre la justicia, la paz y la integridad de la creación y así responder al grito de los pobres y al grito de la tierra”.
Un segundo punto se plantea “avanzar significativamente en la reducción de nuestra huella de CO2 en nuestras comunidades, Provincias/Delegación y entorno, estableciendo un plan concreto en los proyectos P/D y proyectos comunitarios”. Para ello se prevén acciones formativas, a la vez que se proponen pequeños cambios en los estilos de vida personales, como viajar en transporte público, reducir el uso de plásticos o disminuir el consumo de carne y pescado.
Por último, en lo que respecta a la incidencia, la propuesta es “impulsar este plan en lugares de misión y grupos de incidencia: hermanas, niños, personal centros de salud, centros educativos (alumnos, padres y madres), grupos laicales y de iglesia, comunidades donde desarrollamos la misión…”, siempre desde la apertura a “colaborar con otros grupos, trabajando en red con otros organismos, grupos, etc.”, con el objetivo de “hacer red al menos con otras dos entidades afines en cada provincia/delegación”.
Una vez sea aprobado el documento, “cada provincia/delegación adaptará la esencia del proyecto” a sus circunstancias particulares, anuncia la Comisión Interprovincial.
“Sabemos que es posible revertir la degradación irreversible del Planeta, sabemos que, si colaboramos, la Creación tiene recursos para rehacerse, y así podrá continuar alimentando la vida y ‘necesidades de todos los pueblos´, presentes y futuros, como quizás Joaquina nos diría hoy”, se lee en la carta enviada por la Comisión a las comunidades Vedruna, animando a la participación en el proyecto.